La gota que colma el vaso es resultado de la decisión del Ayuntamiento de Vícar por adjudicar el servicio de ayuda a domicilio de esta localidad a una multinacional, en detrimento de la cooperativa que venía realizando esta labor
FAECTA anima a todas las trabajadoras y trabajadores del sector de ayuda a domicilio, que en Andalucía emplea a más de 7000 personas, a salir a manifestarse junto con las entidades sindicales el próximo día 1 de mayo. El objetivo es defender un servicio de calidad prestado por empresas responsables que se gestionan democráticamente y que sin duda alguna están favoreciendo el desarrollo económico de sus pueblos, tal y como vienen haciendo las más de 120 cooperativas que por todo el territorio se dedican a la prestación y gestión de servicio de ayuda a domicilio.
En opinión de Juan Fco. Padilla, presidente de FAECTA-Almería, "las cooperativas fijan la población al territorio, favorecen la cohesión de la zona y tienen una gestión basada en valores y principios que la convierten en organizaciones idóneas para la prestación de servicios en los que prima la atención a las personas, tal y como se ha reconocido en numerosas ocasiones por representantes de la Administración".
Por este motivo, la federación de cooperativas, FAECTA, insta al Ayuntamiento de Vícar a respetar el Pacto Andaluz de Economía Social y a colaborar en la promoción del cooperativismo en Almería, tras adjudicar provisionalmente el servicio de ayuda a domicilio a una multinacional en detrimento de una cooperativa. El consistorio ha tomado esta medida, sin tener en cuenta que la prestación de este servicio se viene realizando por una cooperativa del municipio que da empleo estable y estabilidad a 35 personas y prestan un servicio de calidad y enorme satisfacción de los usuarios, como lo ha avalado el propio alcalde en sucesivas notas de prensa.
La cooperativa Vimasalu, S.Coop.And. De Interés Social no ha ganado la adjudicación porque el Ayuntamiento de Vícar, que hasta la fecha incluía en el pliego de condiciones cláusulas sociales que favorecían a este tipo de empresas (tal y como indica el Dictamen 146/2004 de la Junta Consultiva de Andalucía), ha dejado de hacerlo, poniendo así en riesgo a una cooperativa y a un modelo de gestión basado en valores y principios solidarios.
En este sentido, desde FAECTA se le recuerda al alcalde de Vícar que las cooperativas tenemos un reconocimiento constitucional y estatutario como se recoge en los artículos 129.2 de la Constitución y 163.2 del Estatuto de Autonomía para Andalucía. De dicho reconocimiento que ha de derivarse un decidido apoyo del poder político, pues las cooperativas, y en este caso Vimasalu, son motores del desarrollo local que han contribuido a la dinamización empresarial del municipio de Vícar.
La cooperativa se ha visto desplazada por una multinacional que no mejora la oferta económica, que además va a emplear al mismo personal, y para la que el servicio de ayuda a domicilio no le supone más que otra área de negocio de ese gran grupo multinacional.
Juan Francisco Padilla, presidente de FAECTA-Almería ha señalado que "entendemos que la prestación de servicios relacionados con la creciente implantación del Estado de Bienestar (ayuda a domicilio, sanidad y educación) no pueden ser objeto de lucro". Al parecer estos servicios se pagarán a trece euros la hora, "y aquellos que favorezcan la creación de negocio al amparo de estos servicios tendrán que dar cuenta a la ciudadanía" afirma Padilla.
Según ha indicado FAECTA, la decisión del Ayuntamiento de Vícar vulnera los principios del II Pacto Andaluz por la Economía Social que suscribió la Administración Andaluza, Este acuerdo recoge la apuesta decidida de la Administración Andaluza por la promoción y defensa de las cooperativas y de otras empresas de Economía Social para la externalización o contratación de los servicios de interés general y, especialmente, educación, sanidad y servicios sociales.